Bajo el título “Sistema” el periodista “especializado” en River Plate, Hernán Castillo escribió la siguiente columna en el portal muy River que compartimos con los lectores de golesdemedianoche.com:

La pedida paciencia evidentemente es difícil de lograr. River sigue en zona de ascenso directo pero cuando no gana todo se complica porque Central y Quilmes no dan respiro y lo de Instituto siempre es parejo. Ya muchos quieren que salga Alejandro Domínguez y otros que el que se quede afuera sea Fernando Cavenaghi. Pero Almeyda apunta a utilizar los mismos 11 para el fin de semana ante Ferro. No cambiaría mucho.

River no jugó bien ante Gimnasia pero mereció ganar aunque eso, a esta altura, no importa. La bronca puede más. Daniel Vega solamente tuvo que sacar una pelota al límite, un tiro libre que controló más que bien. Pero eso tampoco suma, parece. Porque se busca más. Se quiere más. Trezeguet falló en una pelota debajo del arco en la que nunca falla. Aguirre en otra que le sacó el arquero de los de La Plata de forma increíble. Si alguna de esas entraba la historia hoy sería diferente. Pero eso no se dio. Y entonces el fastidio aumenta. Y mucho.

Hoy, Almeyda no tocaría ni sistema ni nombres independientemente del rendimiento del equipo ante Gimnasia. Está claro que el sistema es el tema. Que el 4-4-2 que había sido el que mejor se había adaptado al equipo, tuvo que modificarse debido a la aparición goleadora de Trezeguet. Ahora bien, si sale el Chori, ¿quién le lleva la pelota a los dos nueves? Aguirre, la inmediata respuesta de varios, seguramente, no es enganche. Y si sale Cavenaghi, ¿este River está en condiciones de dejar afuera del equipo al goleador del torneo? Muchas preguntas. Pocas respuestas. Lo seguro es que River puede darse el “lujo” de jugar con los tres.

No creo que entre ellos no se pasen la pelota. Domínguez le dio un tiro libre en a cabeza al francés, le hacían penal en esa jugada y la pelota se fue apenas desviada de todas formas y pese a ese agarrón. Y Cavenaghi, en la jugada en la que Aguirre marra esa tremenda posibilidad, es el que envía el centro al medio del área en donde normalmente estaría el francés y no el pelado.

No es Trezeguet, por características, un jugador que toque tantas veces la pelota como otros centrodelanteros, lo suyo es dentro del área. Allá, bien arriba. Basta de ver fantasmas, entonces. Basta de insistir con los egos. Cavenaghi, Trezeguet y Domínguez son lo mejor que le puede pasar a este River. Y, especulaciones al margen, River los necesita para ascender. Buscar peleas entre ellos, es restar. Es poner trabas. Y de acá a junio lo único que interesa es sumar. Para que en estos días, a 9 meses de un verdadero parto que es esto de jugar en la B, todo se vaya acomodando de una buena vez por todas.