El diario rosarino, La Capotal dá cuenta de los sucedido entre rojinegros y La Crema:
Sin mostrar su mejor versión, pero haciendo gala del oportunismo, Newell’s venció merecidamente a Atlético Rafaela por 2 a 0 y trepó en la tabla del Torneo Inicial, donde quedó segundo detrás del líder, Gimnasia de La Plata, con quien juega el próximo martes en el Coloso “Marceo Bielsa”. La Lepra sigue invicto en el torneo.
Pese a no ejercer el dominio del juego como lo hacía en la época en que el Tata Martino era el DT, fue el más claro, punzante y contundente de los dos y el que más lastimó, al punto que antes que el paraguayo Marcos Cáceres convirtiera el gol de la victoria, la Lepra había generado cinco situaciones claras para desnivelar, pero por la falta de claridad o por las manos del arquero local no había podido plasmar en el resultado la ventaja que había generado en el juego.
Hasta que llegó el decisivo gol de Cáceres que le dio la ventaja que merecía y también un poco de tranquilidad para comenzar a manejar la ansiedad de los locales, que a partir de ese momento buscaron con ganas pero sin ideas una igualdad de la que casi nunca estuvo a tiro, más allá de lo exíguo del marcador.
Tras el gol de Cáceres, Newell’s cedió la iniciativa en el juego, aunque no pasó muchos sobresaltos. Sólo un zurdazo de Depetris dentro del área, tras un desborde del recién ingresado Federico González, puso en apuros el arco del Patón Guzmán, que esta vez suspiró una vez que vio pasar el balón muy cerca del travesaño. El mismo Patón que cuando el partido estaba 0 a 0 sacó una pelota de gol a los 7 minutos del partido, tras una notable reacción para ahogar el gol rafaelino.
Y cuando la Crema se debatía entre sus ganas y su impotencia para buscar el empate, Newell’s logró enhebrar una contra que comandó David Trezeguet, que tocó para Maxi Rodríguez, quien se la devolvió para la llegada vacía del Rey David, quien de volea marcó un golazo que no sólo selló la victoria leprosa, sino que le dio rienda suelta a la ilusión de los hinchas que se entusiasman con la posibilidad de volver a estar prendido en la pelea.