LNB PLAYOFFS: QUILMES LO CONSIGUIÓ Y ESTA EN SEMIS DE CONFERENCIA

Apoyado en una defensa bárbara durante el segundo tiempo, con rápidos balances defensivos, con convicción, firmeza y dejando muy incómodo al dueño de casa, Quilmes le ganó 90-77 a Bahía Basket el último punto de los cuartos de final del Sur y se metió en semifinaes. El Cervecero jugó un partido bárbaro en el Casanova, con un poco de suspenso en el final pero sacando un triunfazo gigantesco para dar vuelta una serie de película.

La agresividad defensiva con la que arrancó la noche Quilmes fue clave. El Cervecero entró enchufado, despegándose 18-10 de la mano de un Basualdo muy dominante y certero en el juego interior (10 tantos en ese pasaje). A través de su pivote Quilmes encontró soluciones, aunque cuando Bahía ajustó en el fondo encontró una reacción productiva. Corvalán hizo un parcial bárbaro, aunque las principales claves estuvieron en los rebotes y puntos que arrimó Levy. Mejor en el cierre, Bahía despidió el primer capítulo igualando el score en 20 y demostrando reacción ante un Quilmes que se apagó un poco.

Bahía siguió aceitando su esquemática en el siguiente cuarto, con Levy como bandera, el aporte de calidad de Corvalán y un buen ingreso de Fjellerup. Llegó a sacar cinco de ventaja (33-28), aunque la media cancha de Quilmes con Vildoza-Flor y un par de triples (sea de la dupla o de otros actores como Robinson o Maciel) mantuvieron la historia muy pareja. Por la mínima de 43-42, Bahía entró a un descanso largo con un panorama abierto.

Quilmes mejoró muchísimo en la segunda mitad, defensivamente con Clark asumiendo un papel determinante y un Vildoza de mucho más protagonismo. Es cierto que también volvieron a sumar Basualdo, Flor y un Eslava muy obrero que ayudó bastante y un Enzo Ruiz de pura entrega y juego, pero lo del pibe que en un par de semanas viajará al Baskonia fue clave para que los de Bianchelli tomen una renta casi impensada de doce (64-52). Bahía recortó a siete al terminar el tercer episodio (64-57), pero la defensa de Quilmes que solamente permitió 14 unidades fue lo que desbalanceó el partido.

El trámite siguió inclinándose a favor de un Quilmes que tomó cada vez más confianza, que siguió cómodo en su juego y que fue descolocando cada vez más a Bahía. El Cervecero tuvo mayor convicción y defensivamente anuló a las figuras bahienses (Redivo y Johnson de poco peso hasta entonces), por eso llegó a escaparse a dieciséis (79-63) con seis minutos por jugar.

Hubo suspenso hasta el final porque Bahía no bajó nunca los brazos, apretó defensivamente y obligó a Quilmes a cometer varios errores forzados. Sin embargo Quilmes jugó con el reloj, tuvo ventaja a pesar de que Bahía presionó en toda la cancha y lo fue resolviendo. Fue 90-77 a favor de un Quilmes que volvió a dar vuelta una serie enorme en playoffs (recordando las series del 2015 ante Argentino y Obras) y empezando a pensar ya en el próximo objetivo: Ferro, rival en semifinales.