En página 12 y en el blog de Gustavo Veiga
El caso de Julio Filippini quizás no tenga antecedentes en el mundo del fútbol. En 1976 le dedicó su único gol en Primera al hermano tupamaro que estaba detenido. Salió campeón con Defensor de Montevideo y no jugó nunca más. El delantero quedó libre a los 19 años.