El elenco de Mar del Plata se impuso a Pergamino 82 a 73 con tres pilares: los 23 puntos de Brown, el partidazo de Lugli que casi llegó al triple doble (16 puntos, 13 rebotes y 9 asistencias) y los tres triples del hijo del ídolo Dominé en el cuarto final. En Pergamino gran actuación de Romero con 19.
Los equipos encontraron las respuestas ofensivas en el poste bajo. Luego de un inicio favorable de Pergamino con Romero como protagonista, el que apareció fue el extranjero de Quilmes, Tirrel Brown para despacharse con 9 unidades en el parcial y ser la referencia en ataque. Maffei leyó que el meollo de la cuestión estaba ahí y no perdió tiempo en mandar a las tablas a su nueva incorporación, el interno Bruera; pero este no gravitó. De todas maneras, Pergamino se las ingenió para encontrar gol y cerraron con un ajustado 21 a 19 favorable al local.
En el inicio del segundo el que brilló con todo su esplendor fue Lugli. El “bandido” aportó cuatro puntos, un robo y una asistencia para que el “tricolor” saque la máxima hasta el momento de 10 (29 – 19) obligando al DT visitante a pedir minuto. Pergamino ingresó en una incomodidad producto de la intensidad que propusieron los dirigidos por Medina y Quilmes lo aprovechó. Llegó a sacar una diferencia de 17 (42 – 25) corriendo la cancha y encontrando espacios, pero no pudo aplicar un golpe letal y el equipo de Maffei se recuperó achicando la distancia para irse a los vestuarios con una diferencia de once unidades abajo. Vale decir que para ambos la mira desde el perímtero no estaba calibrada; Quilmes cerró el primer tiempo con 1/11 mientras que la visita lo hizo con 0/6.
Otro dato del juego fue que en el local no pudo ser de la partida por tercera ocasión consecutiva Juan Esteban De La Fuente. La lesión en el sóleo que arrastra el ayuda, le permitió sumar minutos a Luna, y el tucumano demostró que es una opción confiable. Además del juvenil, Brown siguió metido al igual que Lugli y Quilmes manejó los tiempos. Por la vereda pergaminense fue Romero el que siempre estuvo a disposición para mantener a los suyos en juego y se fueron al último round con el marplatense por 10 arriba.
Hasta ese momento, el número en triples del local era de 1/19 y en la visita de 1/11. Pergamino remó y con un triple de González se puso a tres (62 – 59), pero en la siguiente jugada respondió Dominé por la misma vía. Pergamino no aflojó con un González frontal y con Romero resolviendo, pero en Quilmes se le abrió el aro de tres a Dominé. Dos triples determinantes del hijo de la leyenda le dieron a l dueño de casa un triunfo con un sabor por demás especial.
Informe y fotos: Prensa Quilmes de Mar del Plata