Boca Juniors se clasificó semifinalista de la Copa Libertadores de América en la Bombonera de Buenos Aires, tras el 1 a 1 en los 90 minutos y definir desde el punto penal ( 4 a 3 ), en la noche de los 200 partidos de Agustín Orión que fue el héroe de la noche atajando 3.
Boca superó las adversidades más increíbles. Inconvenientes de ficción. Dos lesionados durante el juego: 1 de ellos, Meli, “pegándole” a un compañero, como Pablo Pérez, cuando intentó darle al balón, encontró la pierna de Pérez. Andrés Chávez, después, en un pique, sintió el clásico “pinchazo” del desgarro. La Expulsión de Crisitan Pavón, que convirtió el empate ( Boca lo perdía) y revoelando su camiseta, ya amonestado, vió l a segunda amarilla por quitársela de su cuerpo ( si.. Todos lo calificamos igual al pibe que dijo ” No me acordé de nada cuando vi entrar la pelota en el arco. Estaban mi viejo y mi hermano en la cancha. Me saqué la camiseta y meno mal que Orión nos salvó”.
Todo comenzó a los 20¿ con un centro buscapié de Barcia de Nacional desde la derecha, y de frente a su arco queriendo sacarla al córner, Daniel Cata Díaz, anotó el autogol.
A los 71′ pase formidable de Jara desde el medio, cruzado a la derecha, picó Pavón, recorrió unos metros y le dió al arco para e l 1 a 1 y su tarjeta roja.
Dos tiros desde el punto del penal atajó Conde, y parecía que la clasifiicación se la llevaban a Uruguay. Pero No,. Orión enrome y Carrizo ( que había ingresado en medioc de las lesiones de sus compañeros) selló el pasaporte que parecía cuento ante tanta “mala” para un Boca que no jugó bien.
“Sabíamos que oba a ser duro. Nacional tiene buen equipo; buenos jugadores. El segundo tiempo nos dedicamos a jugar. Merecíamos el empate. Se merecen estra en semifinales los jugadores. Una alegría por ellos. Este equipó demostró que quiere llegar hasta el final.” (Guillermo Barros Schelotto)
” Se cumplió el objetivo de máxima que nos propusimos . Nos han pasado situaciones muy extrañas en este cuatrimestre. Este equipo tiene coraje, vértigo; hombría. Saca lo que tiene que tener el jugador de Boca en momentos difíciles. Lo vi muy frontal. ya habían pateado dos al medio. Los guantes se los di a mi hijo Lucas con mi señora que los amo. hay que estar acá. Siempre la paso mal porque se dicen cosas que no son ciertas. Estoy en un club grande que es lo más lindo del mundo, pero la familia es la que más lo sufre.” (Agustín Orión)