Argentina cerró su preparación mundialista con una derrota ante España por 84-76 en el Olympic Sport Center de Ningbo. De esta manera los dirigidos por Sergio Hernández finalizaron su gira con un saldo de 3 victorias y 3 caídas.
Un gran inicio tuvo Argentina con la velocidad y el ritmo que le impuso Laprovittola generando y anotando (12). Y atrás ejerciendo mucha presión, bloqueos en el poste bajo y sacando ventajas para lastimar en transición, con Scola (7) dañando adentro y afuera. Con esas armas se estableció la máxima del cuarto (11-3), ante una España que no encontraba respuestas. Cuando Rubio calentó la mano cambió la historia, las bombas comenzaron a dañar, el partido se equilibró y los europeos con una gran variedad de recursos tomaron la delantera para ganar el cuarto por 25-23. Argentina tuvo muchos problemas para asegurar el rebote en su tablero y además perdió varios balones en la media cancha (5).
Los de Hernández ganaron en intensidad con el ingreso de Deck (8), quien se convirtió en la principal arma ofensiva con su versatilidad para romper una y otra vez la defensa europea. Argentina cambió la cara, si bien se mantuvo siempre en desventaja, cerró el camino en su tablero, mostrándose más sólido. Sin embargo, en ataque no estuvo fino, dependió mucho del santiagueño y de algunos tiros abiertos de Fjellerup (4). España siguió complicando con el talento de Rubio para generar espacios, manejando los tiempos y eligiendo con su categoría como pasar y por donde. Argentina, con la segunda unidad en cancha siguió teniendo problemas en el ataque estacionado, le costó asegurar el balón (11 pérdidas) y cerró el primer tiempo en desventaja: 37-42.
Tras un par de errores en el inicio del tercer cuarto, Argentina se reacomodó tras un tiempo muerto de Hernández. Con la doble base (Lapro+Vildoza) el equipo encontró otra dinámica, recuperó la intensidad defensiva y continuó mandando en su tablero. Cuando Rubio se empecinó en tomar tiros abiertos sin efectividad, España decayó en su ataque. Mérito total de Argentina, que tras un recupero con doble posterior de Vildoza, pasó al frente (50-49) con 3m49s por jugar. Con Scola en un nivel superlativo para dañar con su variedad de recursos, Argentina cerró el cuarto en ventaja: 58-57.
España volvió a insistir con balones profundos que fueron cargando de faltas a los argentinos, pero la baja efectividad desde la línea terminó siendo improductiva. En un juego donde sucedieron los errores por parte de los dos, Argentina dependió de los puntos de Deck cerca del aro, especialmente por la noche aciaga que tuvo en el perímetro. En tanto, la táctica de Scariolo no varió, porque buscó aprovechar la talla en el poste bajo y eso le dio resultados. Rubio tomó de nuevo el control del partido cuando se serenó y así España ingresó a los últimos 2m49s arriba por cinco (70-75). Ricky mostró todo su reportorio en el cierre y la selección europea se quedó con el último amistoso por 84-76.
Así finalizó una etapa de preparación que tuvo algunos altibajos, pero siempre en la búsqueda de llegar de la mejor manera posible a la instancia mundialista. En su camino a China, el equipo mostró facetas interesantes que pueden ser decisivas a la hora de jugar por los puntos. Una contracción defensiva importante, mucha movilidad para presionar en la generación del rival, fluidez y variantes ofensivas. Hay optimismo de cara a lo que vendrá, pero en eso es clave la recuperación de Campazzo, la piedra angular de esta selección.
Boxscore:
Roberto Martín (Enviado especial a Ningbo, China)
Basquetplus
Foto: @BaloncestoESP