BUENOS AIRES.- El defensor de Independiente Claudio Morel Rodríguez estuvo detenido alrededor de nueve horas en la Comisaría 4ta. de Sarandí, tras un confuso incidente con la policía de la Provincia de Buenos Aires. Recuperó su libertad pasadas las 20.30 con golpes y marcas de bala de goma en una pierna.

El jugador del “Rojo”, además, quedó como imputado en una causa por resistencia a la autoridad, según informaron sus abogados. Por otra parte, a algunos de los policías involucrados en el incidente se les levantará un sumario administrativo dado que Morel Rodríguez, recibió durante el operativo golpes en la cara y las costillas y tiene impactos de balas de goma en uno de sus tobillos.

“Saliendo del entrenamiento, personal de civil lo interceptó. Se detuvo en el control, vio algo que le dio miedo y se escapó. La forma en que se abordó a Morel Rodríguez no fue la mejor, eso hace que la decisión de irse haya sido lógica”, explicó Gonzalo Avrutin Suárez, abogado del jugador.

“Cuando él no se detuvo, se inició una persecución que concluyó con un pequeño choque con otro vehículo. Cuando se bajó del auto e intentó proteger a los chicos que viajaban con él, forcejeó con los policías recibió golpes en el pómulo derecho y patadas. Lo golpearon durante el operativo, en la comisaría el trato fue bueno”, continuó el letrado.

Por su parte, Javier Cantero, presidente de Independiente, expresó que “queremos manifestar nuestra solidaridad con Morel Rodríguez, que es un señor, un buen profesional. Lamentamos lo que le pasó. Yo no me hubiera detenido si hay gente de civil que me quiere parar. Comparto su decisión”.

El hecho
El paraguayo abordaba su camioneta 4×4 junto a sus dos hijos y un sobrino cuando fue invitado a detenerse por policías, que no se identificaron, en el marco de un operativo de control. Al temer un robo o secuestro, el jugador desconoció la orden y fue perseguido por los efectivos de la fuerza, que dispararon balas de goma para amedrentarlo.

Durante su escape involuntario, su camioneta embistió a dos autos particulares hasta que el móvil de la policía chocó la unidad del jugador para garantizar su detención. (Telam – DYN)