Si el Nacional B tiene un candidato de fierro a quedarse con uno de los 3 ascensos directos, ese es Rosario Central.
SI hay un equipo, candidateaxo a pelear por la permanencia en la divisional, ese es Saemiento de Junín, recién ascendido claro que como campeón de la B Metropiltana y tal vez en junio de 2013 Rosario Central haya ascendido y Sarmiento descendido, pero este sábado, con prolijidad ynorden, los de Lippi vencieron con un vol a los 2′ de juego a los Canallas en el mítico Gigante de Arroyito.
Leamos la crónica xel diafio rosarino La Capital con una
mirada “local”, obviamente:
Arrancó una nueva temporada de la B Nacional, pero parece que Central todavía arrastra viejos vicios del final del torneo pasado. Es que el debut del canalla, con nuevo cuerpo técnico y nuevo plantel, se pareció mucho al de los últimos partidos de la temporada anterior. Porque, además de mostrarse algo nervioso en algunos pasajes del partido, se lo vio falto de fútbol, carente de profundidad e irresoluto en ofensiva. Pero también se mostró inseguro e inestable en defensa, donde el sector derecho de la defensa canalla fue una autopista para los jugadores juninenses, quienes entraron con mucha comodidad por ese sector cada vez que lo propusieron. Este cóctel hizo que en su presentación en el torneo cayera sin atenuantes por 1 a 0 ante Sarmiento de Junín.
La presentación de Central quedó muy lejos de la expectativa que se había generado en la previa, con el nuevo ciclo de Miguel Russo en el banco, y el debut de varios de los refuerzos que llegaron a Arroyito, pero además de haber quedado abajo en el resultado también quedó en deuda en el rendimiento, algo que quedó evidenciado en el final del partido cuando la gente despidió al equipo bajo un coro de silbidos.
Es que el equipo no tuvo una identidad de juego, ni circulación de pelota ni profundidad en buena parte del partido, lo que consiguió en cuentagostas sólo en el final del complemento cuando Central iba más por necesidad que por convicción.
Pese a esa falta de ideas, y a que a medida que se acercaba al área se nublaba, apretó a Sarmiento y estuvo muy cerca del empate, pero chocó con su impericia y la muy buena tarea del arquero Ischuk, quien de a poco se fue erigiendo en figura.