La Fiscalía de la Ciudad pidió hoy la captura del exfutbolista Alejandro Mancuso por las reiteradas ausencias a las citaciones a indagatoria en una causa en donde se lo investiga por usurpación y amenazas.
La Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N 22, a cargo de Cristian Longobardi, declaró la rebeldía de Mancuso, ante las consecutivas inasistencias injustificadas a las audiencias a las que fue citado, por los delitos de usurpación y amenazas, informaron voceros judiciales.
Por su parte, el defensor de Mancuso, Alejandro Sanchez Kalbermatten, le afirmó a DyN que esta causa es “una pavada y una tontería” y aseguró que hubo “un error de notificación de una citación” y por eso el exfutbolista no se hizo presente en el expediente.
Mancuso fue volante de Ferro Carril Oeste, Vélez Sarsfield, Boca Juniors e Independiente, jugó para el seleccionado argentino e integró como ayudante de campo el cuerpo técnico del conjunto nacional que comandó Diego Armando Maradona, en Eliminatorias y Mundial de Sudáfrica 2010.
Según se indicó, la causa contra Mancuso se inició a raíz de un terreno que se encuentra en la calle Ercilla al 5900, en el barrio de Liniers, donde el ex volante -que jugó en Ferro, Vélez, Boca e Independiente- tenía unas canchas de “papi fútbol”. El terreno fue ofrecido a la venta y la operación se realizó exitosamente con la entrega de las llaves a su nuevo dueño, pero más tarde Mancuso se opuso al desarrollo de una edificación tipo PH en el lugar, precisaron los voceros. En ese marco, Mancuso y el dueño discutieron y el ex futbolista cambió la cerradura de la construcción y amenazó al nuevo propietario a través de mensajes por Whatsapp, dice la acusación.
Con la intervención del fiscal, el inmueble fue restituido en su totalidad a su legítimo dueño, pero la causa contra Mancuso continua.
“La investigación estableció la existencia de un delito mediante el cual se despojó al propietario de su inmueble, usurpándolo ilegalmente mediante el cambio de cerraduras, lo cual está penado por el artículo 181 del Código Penal”, afirmaron desde la Fiscalía. Ese articulo castiga con penas de entre seis meses a tres años al que “por violencia, amenazas, engaños, abusos de confianza o clandestinidad despojare a otro, total o parcialmente, de la posesión o tenencia de un inmueble o del ejercicio de un derecho real constituido sobre él, sea que el despojo se produzca invadiendo el inmueble, manteniéndose en él o expulsando a los ocupantes”.
También penaliza al que “con violencias o amenazas, turbare la posesión o tenencia de un inmueble”.
El delito de amenazas, en tanto, está castigado “seis meses a dos años el que hiciere uso de amenazas para alarmar o amedrentar a una o más personas” y las penas se elevan a tres años si se usaran armas o amenazas anónimas y a cuatro si se hiciera uso de esas intimidaciones “con el propósito de obligar a otro a hacer, no hacer o tolerar algo contra su voluntad”.