Las especulaciones se terminarían. Los jugadores, súoer entrenados entregarían partidos vibrantes, veloces, electrizantes. Poco tiempo con el balón tirado al lateral, no habría demora en los saques de arco y los árbitros, amonestarían con menos “culpa” a los que intenten hacer tiempo.
La cuestión es que Racing en 34′ convirtió 2 goles y en los 56′ anteriores – es cierto que en un terreno de juego inundado- ninguno.
Racing ganó en la Bombonera de Buenos Aires por 2 a 1, con sendos goles de Gustavo Bou ( a los 17′ y a los 26′) en el cotejo que había comenzado la tarde del diluvio, con el 1 a 0 para los de Arruabarrena marcado por Calleri.